30 noviembre, 2012

Se me olvidó



Se me olvidó tu nombre,
no recuerdo
si te llamabas luz o enredadera,
pero sé que eras agua
porque mis manos tiemblan cuando llueve.

Se me olvidó tu rostro y tu pestaña
y tu piel por mi boca transitada
cuando caímos bajo los cipreses
vencidos por el viento,
pero sé que eras luna
porque cuando la noche se aproxima
se me rompen los ojos
de tanto querer verte en la ventana.

Se me olvidó tu voz, y tu palabra,
pero sé que eres música
porque cuando las horas se disuelven
entre los manantiales de la sangre
mi corazón te canta.

Carlos Medellín








28 noviembre, 2012

Cielo



En ocasiones 
el cielo aparece ante mi vista
 amenazante,
 queriendo mostrar mi pequeñez humana.
 Es entonces cuando al mirarlo,
 le envío el reflejo 
de tus ojos.
 El se calma,
 menguando,
 ante el poder del amor.
 Y otras muchas,
 me hace sentir
 sus lágrimas de soledad con su lluvia.
 Es en estos momentos, 
cuando con mi mano acaricio
 sus gotas contra mi piel.







Mi ángel



Los ángeles, no siempre tienen alas,
el mio tiene las palabras exactas 
para elevarme,
no lleva consigo un halo de luz,
pero me ilumina
 con una bella sonrisa,
no me salva de lo malo,
pero me susurra que camino es el correcto,
 me apoya...me valora y me da fuerza, 
no puede volar,
pero a mí me hace sentir capaz
 de que puedo volar muy alto.

26 noviembre, 2012

El Jardín


Dicen que una imagen habla más que mil palabras… y estas pequeñas historias son eso,
 imágenes que nos hablan directamente al corazón…



EL JARDÍN 

Un rey fue hasta su jardín y descubrió que sus árboles y arbustos se morían:  

    El roble dijo que se moría por no ser tan alto y tan fuerte como el pino.
    Volviéndose al pino, lo halló caído, porque no podía dar uvas como la vid.  
    La vid se moría porque no podía dar flores como la rosa.
    Y la rosa se moría por no ser fuerte y sólida como el roble.

Entonces encontró una planta: un clavel floreciendo y más fresco que nunca.

El rey le preguntó:
   ¿Cómo es que creces en medio de este jardín moribundo? 

La flor le contestó:
   Quizás sea porque siempre supuse que cuando me plantaste, querías ver claveles.
  Si hubieses querido otro roble, lo habrías plantado. 
 En aquel momento me dije,
 intentaré ser el clavel de la mejor manera que pueda,
 y aquí me tienes.  El más hermoso y bello clavel de tu jardín. 

Nosotros somos, esto que somos, pero vivimos marchitándonos en nuestras propias insatisfacciones,
  en nuestras absurdas comparaciones con los demás:
 “si yo fuera”, “si yo tuviera”, “si mi vida fuera”. 
 Siempre conjugando el futuro incierto en vez del presente concreto, 
empecinados en no querer aceptar,
 que la felicidad es un estado subjetivo y voluntario.

Hoy podemos elegir: estar felices con lo que somos, con lo que tenemos, 
o vivir amargados por lo que no tenemos o no podemos ser.
  Sólo podremos florecer, el día que aceptemos que somos lo que somos. 
 ¡Somos únicos! y nadie puede hacer, lo que nosotros vinimos a hacer aquí. 

Comienza haciendo lo que es necesario, luego lo que es posible, 
y de repente estarás haciendo lo que es imposible. 
 Nos merecemos darle el mejor color a nuestra vida.  
Hay quienes no se exponen al sol, para no sentir su sombra. 


No permitas que el jardín de tu vida se marchite 
por el hecho de no querer entender esa voz que brilla
 desde lo más profundo de tu corazón.
  Recuerda: nadie es más que nadie. 
 Sólo que unos, hacen más que otros.

Algún Día



Algún día
 te escribiré un poema
 que no mencione el aire 
ni la noche; 
un poema
 que omita los nombres de las flores, 
que no tenga jazmines o magnolias.

Algún día 
te escribiré un poema sin pájaros, 
sin fuentes,
 un poema que eluda el mar 
y que no mire a las estrellas.

Algún día
 te escribiré un poema
 que se limite a pasar los dedos
 por tu piel 
y que convierta en palabras
 tu mirada. 
Sin comparaciones,
 sin metáforas; 
algún día escribiré un poema que huela a ti, 
un poema
 con el ritmo de tus pulsaciones, 
con la intensidad estrujada de tu abrazo. 
Algún día
 te escribiré un poema, 
el canto de mi dicha.

Darío Jaramillo Agudelo


No te Rindas



"No te rindas que la vida es eso, 
continuar el viaje,
 perseguir tus sueños,
 destrabar el tiempo, 
correr los escombros..
. No te rindas, por favor no cedas, 
aunque el frío queme,
 aunque el miedo muerda, 
aunque el sol se esconda, 
y se calle el viento, 
aún hay fuego en tu alma,
 aún hay vida en tus sueños. 
Porque la vida es tuya y tuyo también el deseo,
 porque cada día 
es un comienzo nuevo,
 porque esta es la hora y el mejor momento." 
                         
 Benedetti

25 noviembre, 2012

La Luna





La luna se puede tomar a cucharadas
o como una cápsula cada dos horas.
Es buena como hipnótico y sedante
y también alivia
a los que se han intoxicado de filosofía.
Un pedazo de luna en el bolsillo
es mejor amuleto que la pata de conejo:
sirve para encontrar a quien se ama,
para ser rico sin que lo sepa nadie
y para alejar a los médicos y las clínicas.
Se puede dar de postre a los niños
cuando no se han dormido,
y unas gotas de luna en los ojos de los ancianos
ayudan a bien morir.

Pon una hoja tierna de la luna
debajo de tu almohada
y mirarás lo que quieras ver.
Lleva siempre un frasquito del aire de la luna
para cuando te ahogues,
y dale la llave de la luna
a los presos y a los desencantados.
Para los condenados a muerte
y para los condenados a vida
no hay mejor estimulante que la luna
en dosis precisas y controladas.

Jaime Sabines



Liberarse



Todo depende de la luz,
de la manera de iluminar las cosas...
Todo depende de la forma, 
de los contornos,
de las interpolaciones y 
de las dudas.
Todo también depende
de que el tiempo nos marque, 
de que los espacios nos den los titulares. 
El verdadero problema es elegir entre 
perseguir las sombras 
o resignarse a ser el perseguido. 
Un extraño “To be or not to be”
en este casi ser 
en este casi no ser.
Salir desde las sombras
o hacer las sombras perdurables. 
Y en la última etapa del abismo 
después de liberar a los otros,
a todos los que son los otros,
recordar,
sin urgencias, 
que uno es el preso. 
Y a partir de allí...
liberarse. 




"Es justamente la posibilidad de realizar un sueño
lo que hace que la vida sea interesante"

Paulo Coelho