21 mayo, 2014

Descubriendo nuevos poetas-3

Ángel Guinda Casales ( Zaragoza )

CAJAS


Lo diría un indígena y tendría razón.

“Ustedes tienen la vida organizada en cajas.
Nacen y les dejan en una cajita,
su casa es una caja, y las habitaciones
son cajas más pequeñas.
Suben a la casa en una caja,
bajan a la calle en una caja.
Viajan en una caja.
Duermen y hacen el amor sobre una caja.
A través de una caja ven el mundo. 
Cambian de casa: lo meten todo en cajas.
Y cuando mueren
les introducen también en una caja.
Los Bancos y las Cajas tienen caja,
los establecimientos tienen y hacen caja.”
Todo está hecho para que encajemos.
Nos encajan la vida. 
Algunos no encajamos, y nos desencajamos.

.
'Claro interior' 
en '18 poemas. Antoloxía' (Lastura, 2013)

*[fotografía: ParkeHarrison]


La diferencia


Todo armoniza por la diferencia:
el desierto de hielo, el árbol en la roca,
la suave furia del mar y las estrellas.

Nacemos transparentes como el aire,
nos volvemos opacos como el mármol.

Uno puede soportar tanto dolor
como placer es capaz de recibir.
Piedra, hierba, fuego, agua,
luz, tiniebla, tempestad de arena:
todo armoniza por la diferencia.

La ciudad, mientras duermes,
draga el silencio que todo lo hace nuevo.

Nadie tiene otra patria que su soledad,
nadie llega a nadie si no es para marcharse.

Tiene el amor en sus abrazos
el atroz método del amordazamiento.
Cuanto nos llena del otro nos vacía.

Nube, raíz, el canto de los pájaros:
todo armoniza por la diferencia.



Ángel Guinda Casales nació en Zaragoza el 26 de agosto de 1948.
Ha sido galardonado con el Premio de las Letras Aragonesas 2010. Sus últimos libros publicados son Espectral, Caja de lava, (Rigor vitae) y Materia del amor.

12 mayo, 2014

Frases-22







Agotar a las personas


SOBRE EL AGOTAR A LAS PERSONAS - 

Una persona se agota cuando la consideramos un recurso o un espejo.
 Se agota cuando nos aferramos, cuando compramos su libertad a cambio de amor.
 Se agota cuando se cansa de cargar con nuestras expectativas,
 cuando se harta de simular para caber en su rol,
 cuando ya no puede ser espontánea con nosotros porque está tratando de acomodarse.

Agotamos cuando nuestro amor o nuestro odio es intenso pero mezquino,
 cuando ese amor o ese odio quiere “todas las perdices”,
 no se contenta con la única perdiz, 
la necesaria y la suficiente.
 Pasa que abusamos de la gente, eso es agotarlos.

 Agotamos a una persona cuando la tenemos prisionera de un afecto,
 cuando especulamos, cuando usamos la lógica del comerciante,
 cuando llevamos una libreta donde apuntamos todas sus faltas 
y luego vamos, como infames recaudadores, a cobrárselas.
Agotamos si celamos, pero también si descuidamos al otro.

 Agotamos a una persona querida cuando nuestro querer está repleto de exigencias,
 cuando hemos hecho contratos, cuando estamos llenos de promesas incumplidas
 y cuando la volvemos a atar a una nueva promesa.

 Agotamos cuando lo que amamos en el otro es el amor que nos tiene.
Una persona se agota si nosotros, como parte de su historia personal,
 le infringimos cautiverio, la arrinconamos a su pasado, 
no la dejamos ser por nuestros prejuicios, 
creemos saber todo de ella y la damos por sentada,
 despreciamos sus intentos de cambio.

Un guerrero si ama, no agota a su amado.
 Porque trata siempre de tener ojos nuevos para la relación,
 porque hace que fluya creativamente,
 porque hace ofrendas y no exige, ni corrige, 
ni tolera, ni simula, ni amenaza. 

Un guerrero cuando ama se da, pero no da lo que no puede,
 lo que es ilegítimo dar en una relación de poder: 
su libertad.

 D.G.Ulloa


Fuente: www.animalespiritual.com